Sacristía-Museo de la Capilla Real. Granada

FOTOGRAFÍAS:Archivo Pedro Salmerón

Acondicionamiento museográfico. 1990-1993

La sacristía de la Capilla Real tiene, desde su fundación, un papel complementario al habitual en la custodia de los objetos legados a la misma por los Reyes Católicos, aspecto que se reconoce expresamente en una carta de los monarcas datada en 1504. En la reforma emprendida en los años cuarenta del siglo XX, el espacio sufrió una importante remodelación quedando configurado como museo-sacristía.

 

El ámbito se dividía en dos partes mediante una verja y un pavimento de diferente altura. En el área más próxima al altar mayor, para facilitar la conexión con el mismo, se instaló la sacristía propiamente dicha, con sus cajoneras para las vestimentas litúrgicas; y, en la reducida zona restante, se habilitó el museo. Antes de la intervención, la organización ambiental del espacio constituía una herencia de este momento presentando, al mismo tiempo, ventajas e inconvenientes en materia la conservación.

Los problemas de conservación de dicha instalación se hallaban fundamentalmente en el aislamiento de los muros para ocultar su deterioro mediante un recubrimiento de corcho negro tapado al exterior empleando una tela de terciopelo rojo con franjas brocadas. Los restantes estaban relacionados fundamentalmente con el papel y los tejidos: en el primero de los casos, por una intensidad lumínica excesiva; y, en el segundo, por el cuelgue defectuoso de muchas vestimentas. La intervención fue ejecutada con una supervisión y coordinación continuas del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico, contando con la colaboración de entidades de primer nivel en el ámbito de la conservación nacional e internacional. La sala se limpió completamente desmontando el museo y la sacristía anteriores y retirando el recubrimiento de corcho y el tejido que cubría las paredes. El proceso se desarrolló lentamente para conseguir el máximo de datos de la instalación anterior.

Los requisitos para el nuevo museo derivados de esta investigación sistemática fueron los siguientes: control minucioso de la luz natural, ausencia de instalación de climatización por el excelente comportamiento ambiental de la sala, elección de un nuevo concepto de vitrina, cercanía en la iluminación de las tablas y agrupación coherente de elementos de diferente naturaleza cuidando los soportes más delicados. El museo, organizado de forma unitaria en el espacio de 10 x 22 metros reservado a tal fin, siguió manteniendo la función simultánea de sacristía para cumplir con las condiciones del legado de los Reyes Católicos. La reordenación de la colección supuso el traslado y emplazamiento en el espacio del retablo de Jacobo Florentino con el Tríptico de la Pasión, realizado por Dirk Bouts.

Ficha del proyecto:

Resumen de la intervención

Acondicionamiento museográfico del Museo-Sacristía de la Capilla Real de Granada (1990-1993)

Superficies

Útil: 220 m²

Construida: 270 m²

Financiación

Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía. Programa Expo´92

Empresas adjudicatarias

Conservación del Patrimonio Artístico, S.L.

Proyecto

Pedro Salmerón Escobar. Arquitecto

Elisa Entrena Núñez. Arquitecta Técnica

María Felisa Ramírez Martín. Arquitecta Técnica

Dirección de las obras

Pedro Salmerón Escobar. Arquitecto

Elisa Entrena Núñez. Arquitecta Técnica

María Felisa Ramírez Martín. Arquitecta Técnica

Investigación asociada

Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico (IAPH)

Promotor

Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía

Fotografía

Archivo Pedro Salmerón